Los números demuestran porque el BAFICI a través de los años se ha convertido en el festival internacional de cine independiente más extraordinario y enriquecedor del momento.
La decimotercera edición de este evento concluyó con 300 mil visitantes, 210 mil entradas vendidas, 1083 funciones y 438 películas proyectadas, superando en cantidad los números del año pasado que concluyó con 20 mil visitantes, 10 mil entradas y 14 funciones menos, lo que demuestra que no es poco y que el esfuerzo ha dado sus frutos.
De la totalidad de los films, se exhibieron 100 cortos, 307 largos y 31 mediometrajes, de los cuáles 113 títulos eran argentinos, representando un gran porcentaje del mismo.“Antes de que comenzara el festival muchas de las entradas estaban agotadas. Es increíble la rapidez con que se venden, no podría asegurar un número exacto de los expectadores que nos han visitado hasta el momento, pero si puedo asegurar que los viernes y sábados todas las salas estaban llenas”, dijo la vendedora de entradas Mariana Iglesias el día previo al cierre, de la sede de Arteplex Belgrano sobre Avenida Cabildo al 2829.
Es el festival más esperado por todos los cinéfilos que desean llenarse con una dosis extra de cine, con una manera distinta de hacerlo también. Rodrigo Fernández, uno de los tantos jóvenes que salió de la sala tras ver la producción chilena: “Mi último round” de Julio Jorquera Arriagada asegura: “Este es el tipo de cine que amo ver. Creo que el cine independiente merece muchísimo más reconocimiento que ése que se exhibe en todos lados por ser más comercial, once días no son suficientes para disfrutar de este fenómeno”.
No caben dudas de que año tras año, el BAFICI aumenta su popularidad y alcance al público y los números avalan esta afirmación. Sólo nos queda esperar al 2012 para saber si este balance continúa en ascenso y seguirá afianzando seguidores tal como se espera.
Gisela Jarmota